... oxford street 2* ...



¿No os pasa que hay semanas que se hacen cuesta arriba? A mí me ha pasado esta! Y lo peor es que no puedo decir: "Por fin es viernes!!!" Ya que mañana me toca seguir madrugando (aunque un poquito menos por ser sábado) y trabajar (más horas de lo normal, por eso! porque es sábado). Lo mejor será mirarlo todo con optimismo y aceptar lo que viene para que  el camino se haga menos duro;  ya que lo único a lo que conlleva el ser negativo es a una especie de estrés y desesperación nada buenos (que se lo pregunten a mi espalda!).

Como os dije hace un par de semanas, si hay algo que de verdad me gusta de las zonas comerciales de LONDRES, es la cantidad, variedad e imaginación que hay en cada uno de los escaparates. En estas fechas de rebajas parece que se ven menos lucidos, ya que todos los maniquíes están en SALE y las ventanas de las tiendas "decoradas" con enormes pancartas en colores rojo y blanco que anuncian las esperadas, teminas y, ya últimas, rebajas de la temporada.

Pero el espiríturo comercial y marketiniano nunca descansan, por eso, mientras todavía nos estamos pelando de frío y los cielos están parcialmente nublados, las firmas de moda nos deleitan con el último grito en pantalones cortos, sandalias y sombreros para protegernos del sol de la manera más fashion posible. Yo prefiero no pensar en calor y no hacerme falsas ilusiones de poder dejar la bufanda y el abrigo en casa y fijarme esos escaparates que derrochan cotidianidad y fantasía a partes iguales.

A ver qué os parecen!

Yo no he podido evitar sentir debilidad por el rinconcito en el suelo reservado a las revistas de moda y decoración que hacen que me recuerden a la mía, y a la estantería principal de este dormitorio improvisado en el corazón de OXFORD STREET decorado con llamativas y antiguas cámaras de fotos.

Es una pena no haber podido sacar un plano general. Pero el gentío me impidió en su día poder disfrutar de la estampa unos metros más atrás.

See you!!!

... coffee & cupcakes ...

Ayer, cuando os escribía a horas intempestivas de la noche, os comentaba que me gusta dedicar mis días libres a comer con los amigos y a pasar el tiempo hablando, muchas veces, de conversaciones sin sentido que nos hacen super felices.  Pues bien, la comida de ayer tuvo lugar en casa de María. Es un solete! Siempre nos prepara a Nicki y a mi platos deliciosos typical spanish. Yo que soy más patosilla (más bien lo que soy es una vaga) con los quehaceres culinarios siempre me pido llevar el postre con el que endulzar la tarde y acompañar el café.

Hace un par de meses, en uno de esos paseos en soledad por la ciudad, descubrí una pequeña cafetería por el barrio de South Kensington decorada en tonos pastel y con una exposición de dulces en el escaparate de esas que invitan a pasar, observar y probar. Así que ayer decidí volver y comprar una pequeña cajita con un cupcake, un browni y un pastelito esponjoso con sabor a vainilla y coco que tenía una pinta maravillosa pero que según nuestro criterio de entendidos en dulces debaja mucho que desear.

¿Tienen buena pinta, verdad?

Os cuento! El sitio se llama Bea´s of Blommsbury y si os interesa podéis visitar su página web pinchando aquí. Es una franquicia que tiene varios locales repartidos por todo LONDRES en la que se puede tomar el té, el café, probar sus deliciosos pastelitos o deleitarse con su menú de comida salada que cambia todos los días.

Ayer escogí la opción de take away (me encanta la sensación de ir por las calles de LONDRES con pequeñas cajitas de diseño tipo película ;p), pero Nicky, María y yo hemos decidido que en nuestra próxima reunión para el té de las 5 situaremos el contexto en una de las cafeterías de esta cadena.

¿Alguien se apunta?

FELIZ JUEVES!

... on days like today ...

Me encantan los días OFF. Y a quién no! La verdad es que en el trabajo me lo paso bien y no termino ningún día sin aprender algo nuevo o conocer a alguien diferente, pero los días libres son para mi especiales.

Lo bueno que tiene tener un horario diferente cada semana es que nunca sabes lo que te espera. Sí, hay veces que es más complicado organizarse y concordar horarios con los amigos, pero la improvisación y el no saber qué nos deparan las siguientes horas del día los hacen peculiares.

Lo malo es que yo quiero hacer de todo en 24 horas y a menudo me frustro por no alcanzar mis espectativas, pero saber organizarse y repartir el tiempo también es una virtud que te lleva a aprender que quien mucho abarca poco aprieta, así que...

Empezaré por contaros que lo principal para mí de los días libres es dormir. Remolonear entre las sábanas, no tener que apagar el despertador, ver como amanece desde tu cama,... para mí es el mejor lujo que se puede tener! Después está saltarse la rutina e irse a desayunar fuera: mi café caramel latte, mis tostadas, mi revista preferida y junto a ella mi guía de Londres y mi agenda. Hoy me apetecía gastar mi tiempo paseando por callejuelas y recovecos de esos que no salen en las guías. Me apetecía deleitarme con los colores de las fachadas de los edificios, del olor a húmedo de los parques, del ruido de los coches, del movimiento y los frenazos de los autobuses, del ir y venir del gentío, del jolgorio de los niños en el patio del colegio,... Y después de esas horas de soledad con mis pensamientos qué mejor forma de empezar la tarde que con una comida con dos amigos, hablando de todo y de nada, con silencios agradables, con el sonido de una cuchara que roza el fondo, con el traqueteo de una cafetera que tiene listo el café, del sabor de un brownie acompado por un delicioso cupcake y del aroma de una sutil vela que alumbra una tarde de tertulia y recogimiento en casa. Y a las horas, cuando tu estómago ya no asimila más dulce, cojes el metro, haces transbordo y en 9 paradas estás saboreando el amargo y espumoso sabor de una cerveza bien fría en el bar de intercambio de todos los miércoles, junto con las mismas personas a las que has llamado expresamente para pasar la tarde con ellos, con gente nueva que conoces en la barra mientras pides y otros a los que hace meses que no ves y que lo dejan todo por estar contigo aunque sea dos horas. Ingleses, franceses, chinos, españoles, italianos, alemanes,... cuando se trata de disfrutar todos hablamos el mismo idioma.

Y ahora, una vez en casa, pijama, vasito de leche y a la cama. Sin olvidar poner el despertador hasta esperar el siguiente día libre para disfrutar de los pequeños grandes momentos de esta vida y su loca realidad.  

... busaba ...

Como os comentaba ayer, estos días de desconexión blogil me han servido para organizar los documentos en el ordenador y para recopilar fotos de sitios que por unas cosas o por otras todavía no os había mostrado.

Hoy es uno de esos días en los que me comería una vaca! No sé qué me pasa pero estoy hambrienta y sólo puedo pensar en comida. Así que cuando he terminado el trabajo, en mi camino de vuelta a casa, mientras pensaba en el post de hoy, he decidido que os hablaría de alguno de los restaurantes chulos de esos que hacen mis delicias las noches de viernes en las que engancho a alguna amiga para ir a cenar.

El restautante del que os quiero hablar hoy se llama BUSABA y lo podría calificar con las tres "b" de "b"ueno, "b"onito y "b"arato. Una cadena de restaurantes al más puro estilo thai en el centro de LONDRES.  Es un lugar 100%  recomendable en el que el servicio al cliente es rápido y efectivo, la comida es rica y diferente, y la experiencia resulta de lo más agradable. Quizá el único inconveniente es que es un tanto ruidoso, pero a quién no le gusta alzar la voz mientras se divierte! A mi me encanta!

Tienen una gran variedad de platos en los que es mejor dejarse aconsejar si no sois muy conocedores de este tipo de comida. Yo el día que fui (cómo pasa el tiempo, hace justo 2 meses!) tenía muy claro lo que quería ya que previamante me había estudiado a conciencia el menú (se puede descargar de la web de forma sencilla pinchando aquí). Lo que más me gustó fue el arroz de coco y con lo que mejor me lo pasé fue intentando cortar los bambús que rodeaban al pescado de forma decorativa para llevarmelos a la boca. Dos días después me enteré de que eso no se suele comer... Pero a mí me estuvo tan ricooo ;). 

Os dejo con las fotos de aquella cena que algún día espero repetir... Estaba todo tan rico!!! Además, esa noche había luna llena y la compañía junto la conversación tampoco estuvo nada mal!

Paseando por la ciudad, después de probar el sitio, he visto que esta franquicia tiene más locales por otros barrios de Londres. Yo os dejo la dirección del que conozco, por cierto, muy céntrico! Para que vayáis a lo seguro (si es que os fiáis de mí).

319 Old Street

Picadilly

London

Ah! Y no dejéis de probar el mojito con vainilla, menta, lima y chili: NO TIENE DESPERDICIO!

Happy TUESDAY!

... july flame ...

Hola!

Hasta este fin de semana no he sido consciente de todo el tiempo que llevaba sin escribir en este, mi pequeño diario particular. Pero he tenido unas semanas un tanto moviditas y repletas de actos sociales que me han tenido separada de la vida 2.0. Pero tranquilos! Estoy bien! Por todos los e.mails y llamadas recibidas esta semana he visto que de verdad tengo seguidores y que estábais preocupados por mí . Hasta varios clientes de la cafetería que saben de mi blog estaban esta mañana un poco asustados por mi salud. Y bueno, como les he dicho a ellos, analizando la situación he tenido la enfermedad de la dejadez y la pasión por no parar en casa.

Estas dos semanas han transcurrido entre reencuentros con amigos que volvián de las  (largas) vacaciones de Navidad, horas en la cafetería, quedadas con nuevos amigos con los que disfrutar de Londres, cafés y alguna pinta que otra con aquellos que me hacen más llevadera mi estancia aquí;  decisiones de futuro en cuanto a destino laboral se refiere, paseos por los pasillo de la ópera del Covent Garden y deleite con el ballet clásico de Romero&Julieta, sushi party, museos varios, mi primer paseo en un taxi londinense gracias a mi jefe, etc., etc., Muchas emociones: gente que te dice que se va dentro de poco, gente que se queda, gente que viene por tiempo indefinido,... Y entre café y café, tardes de encierro conmigo misma para disfrutar de la lectura en las tardes grises y frías del viejo Londres y para ponerme al día con la gramática inglesa. Que entre tanta dedicación al trabajo y a disfrutar de la ciudad a veces pierdo el norte y se me olvida que tengo que aprender el idioma!

Espero esta vez sí, poner 100% con el blog y ser constante. Tengo que cumplir lo que prometo y ser perseverante en lo que deseo.  Ayer alguien vía e.mail me escribió una frase que decía: "Hay tres cosas que nunca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida".  Y si me pongo a pensar tengo muchas cosas que contar, muchas fotos que enseñar y poco tiempo que perder, así que, a por ello!!! Eso sí, deciros que estas semanas de ausencia me han venido estupéndamente para visitar lugares, escuchar nuevas canciones y aprender nuevos conceptos de vida. Por lo que ahora temas no me faltan para enseñar (una cosa por la otra).

Y como es lunes, os traigo una canción. Es bonita, es tranquila, es sincera. Es ideal para estos días que de verdad, son muy fríos y muy oscuros. No recuerdo cuándo vi con claridad el sol por última vez o cuando no salí a la calle sin paraguas. Y aunque sin duda me encanta, creo que el día que vea el primer rayo de sol que caliente de verdad me voy a asustar y todo.  Reflexiones a parte... no dejéis de escuchar esta canción:

♫ ♫ ♫ ... july flame ... ♫ ♫ ♫

Su autora se llama Laura Veirs, y como las canciones que escucho últimamente y que os muestro por aquí, la descubrí por casualidad buceando de páginas de música cuyas letras aportan significado y sacan a relucir sentimientos. Me gusta la idea de poder expresar las sensaciones que tenemos dentro con canciones. Y aunque esta canción en concreto tiene para mí un significado un tanto abstracto he encontrado el encanto de la melodía en estas dos estrofas: 

"July flame
Sweet summer peach
High up in the branch
Just out of my reach

(...)

July flame
Ashes of a secret heart
Falling in my lemonade
Unslakable thirsting in the backyard"

Me parece una metáfora muy bonita que poder aplicar en determinados momentos de la vida.

"Can I call you mine?"

Many Kisses y feliz comienzo de semana!!!

... i´m in here ...

No os podéis imaginar el día tan tonto que tengo hoy. Estoy super cansada... Ha sido un día muy intenso de trabajo y lleno de presión. Tanto que no tengo fuerzas ni para coger el teclado del ordenador. Pero como uno de mis propósitos de año nuevo era actualizar cuanto más mejor, creo que si me voy a la cama sin "hablaros" un poquito me sentiría mal y no conciliaría el sueño.

De  todas formas los lunes son relajados con vosotros. Es mi dedicado a las bandas sonoras de la vida y al descubriendo de grandes grupos musicales que hasta ahora jamás me había parado a escuchar.

Hoy os presento a Sia, una cantante pop australiana que me ha cautivado por su voz dulce a la par que desgarrada. La descubrí hace un par de días gracias a las listas que mis amigos de Facebook se crean en Spotify. Y ni qué decir tiene que yo ya la he agregado a favoritos. He escuchado la mayoría de sus canciones y me quedo con la que se titula I´m in here. Sin fijarme en la letra ni en el significado de esta, ya sólo el título me transmitio fuerza y me dijo mucho con solo tres palabras. El gusto por la canción vino después.

"I’m in here.
Can anybody see me?
Can anybody help?

I’m in here,
A prisoner of history.
Can anybody help?"

Para gustos las interpretaciones de las letras de las canciones. Es lo que me gusta de la música, que cada uno puede interpretar el sentido, la letra o la melodía de maneras totalmente distintas. Incluso en una misma persona pueden residir diferentes interpretaciones dependiendo del estado de ánimo en el que nos encontremos.

Yo me quedo con mi particular visión de la letra y disfrutando de ella. Aunque en días tan cansados comos los de hoy, dejarse llevar por los sonidos sin pensar en nada más es lo más recomendable.

♫ ♫ ♫ ... i´m in here ...  ♫ ♫ ♫

p.d._ papá&mamá, perdonad que hoy no os llame. No puedo articular palabra. Solo es cansancio y ganas de pasar mi tarde entre la revitalizante ducha que me voy a dar ahora mismo y las sábanas de mi cama recién puestas. Mañana será otro día!

... oxford street ...

No sé si recordáis que hace un par de semana os hablaba (aquí) del flechazo que tuve con los escaparates de Oxford Street. Bien, pues si aquello fue amor a primera vista hoy es cuando me he enamorado perdidamente. Aprovechando que Ludivine y yo habíamos cobrado nuestro jornal, nos hemos ido de rebajas (ni qué decir tiene que los ojos siempre se nos van a las prendas de nueva temporada). Hemos estado toda la mañana y parte de la tarde pensando en nuestros planes al salir del trabajo. Y como somos chicas de palabra... A GASTAR SE HA DICHO. Ella estaba super contenta con sus compras y la verdad es que a mí también me ha encantado el jersey de agujeritos que se ha comprado y los leggins super perfectos y muy amorosos al tacto. Yo, sin embargo, la única compra que he hecho ha sido en el supermercado (mi cena), porque si me ponía a comprar me llevaba todo y el problema es que el día que me vaya de aquí voy a tener que alquilar un avión para mí sola y mis cosas.

El caso es que nos lo hemos pasado super bien! Al final estabamos derrotadas, pero ha sido divertido. Así hemos aprendido palabras nuevas sobre el vocabulario de moda francés y el español mientras tratábamos de explicarlo en inglés. Cualquiera que nos escuchase... ;p.

En mi camino de vuelta al metro me he topado con los escaparates de Oxford Street y no he podido resitirme a fotografiarlos. ME ENCANTAN! Expresan tanto y derrochan tanta imaginación! Son verdaderas obras de arte que invitan a pasar los minutos observando cada detalle. He hecho como unas 70 fotos (había muchísimosssssss) pero os lo iré dosificando poco a poco.

FELIZ FIN DE SEMANA!!! 

... doors are red ...



Me encanta que en mis días OFF el sol brille como nunca para poder disfrutar un poco más callejeando por la ciudad. Hoy he ido a desayunar a mi cafetería. Mis compañeras han tenido la amabilidad de prepararme el desayuno y he podido empezar la mañana de forma amena y divertida, entre coversaciones absurdas a la par que interesantes, e incluso e tenido una lección de inglés con uno de mis clientes VIP, Victor, que viene todos los días a tomarse su Latte NO FROTH!!!  La verdad es que me siento realizada porque a este señor nunca le entiendo cuando habla. Es el típico inglés cerrado que habla en arcaico londinense, pero hoy, hemos tenido una conversación sobre el arte en Londres bastante interesante. Y es que le he comentado que mi idea de hoy era pasar la mañana en la TATE BRITAIN y se ha emocionado con el tema.

En principio tenía destinado dedicar este post  a hablaros un poco de este maravilloso museo, pero algo se ha cruzado en mi camino y aunque a muchos os puede parecer una tontería yo he disfrutado de lo lindo. Paseando por los alrededores de Pimlico, camino de vuelta al metro, me he encontrado con un rincón de lo más encantador en el que todas las casas tenían las puertas rojas. Y como no me gusta el rojo... ;) Creo que no me ha quedado ninguna por fotografíar! Por unos instantes he sido tan feliz con tan poco! (os comenté aquí mi fanatismo por las puertas de Londres)  Ya no sólo me ha sorprendido el rincón por mi color fetiche, lo llamativo ha sido el hecho de que todas las puertas fueran tan iguales pero a la vez tan distintas. Cada una con su propia personalidad y con sus historias de puertas para adentro.

Y como hoy tenía el ego un tanto subidito (:p), he posado junto a las maravillosas puertas de este barrio londinense más feliz que un regaliz.

Os dejo con las instantáneas... Espero que los SS.MM los Reyes hayan reconocido vuestro buen comportamiento con regalos. Yo he sido tan buena que a parte de los calcetines de ayer me he autoregalado una postal de Turner de un cuadro que me ha encantado en el museo. Ya os la enseñaré.

p.d._ hoy he aprendido dos lecciones básicas que os pueden servir de ayuda si sois tan desastres como yo:

    1. Por más que quiera / empeñe las puertas de casa no se abren con el abono transportes.

    2. Si lleváis un café en la mano y tenéis pensado cruzar la calle por donde no es debido y eso implica correr como si no hubiera mañana, cuidáos de poner el dedo en la agujero que tiene la taza para beber, ya que luego os podéis encontrar con una gran sorpresa y ser unos cerditos paseando por la ciudad.

   Enjoy the day!